El proceso del V Encuentro fue titulado Discípulos Misioneros, Testigos del Amor de Dios. Esta frase me hace recordar especialmente el primer objetivo del proceso que es:
“Llamar a todos los católicos en Estados Unidos a ser discípulos misioneros auténticos y alegres que sean testigos del amor de Diaos con una voz profética al salir al encuentro del pueblo hispano, aceptando y valorando así la diversidad cultural en la Iglesia norteamericana”.
Salir al encuentro de aquellos en las periferias llevando la Buena Nueva ofrece un gran testimonio especialmente porque es parte de nuestra identidad cristiana. Es en virtud del bautismo que cada persona es partícipe de la misión de la Iglesia, y en donde, la fe que el discípulo misionero tiene toma formas concretas en las acciones realizadas.
El Plan Pastoral Nacional para el Ministerio Hispano/Latino de 2023 tiene como título: Discípulos Misioneros en Salida con Alegría. Ante las difíciles situaciones que se observan hoy en día, pareciera difícil pensar el que se pueda salir con alegría. El Documento de Aparecida indica “en su realidad social concreta, el discípulo hace la experiencia del encuentro con Jesucristo vivo, madura su vocación cristiana, descubre la riqueza y la gracia de ser misionero y anuncia la Palabra con alegría” (#167). Cabe resaltar, que el discípulo misionero no puede prescindir del alimento de la Sagrada Eucaristía que lo acompaña y fortalece en cada paso que da en la misión.
Al prepararnos para las capacitaciones en la implementación del Plan Pastoral Nacional a nivel diocesano y parroquial, en los próximos meses se ofrecerán reflexiones sobre cada una de las prioridades. El objetivo es profundizar en los objetivos y enfoques pastorales indicados
Eva Gonzalez, directora de Ministerio Hispano, Arquidiócesis de Louisville
