CIUDAD DEL VATICANO (CNS) – El ser cristiano significa servir al prójimo de manera humilde, sin aplicarse “maquillaje” al alma para hacerla parecer más bonita, dijo el papa Francisco.
“Ser cristiano significa lo que Jesús hizo: servir”, dijo en una homilía del 30 de abril durante una Misa en la capilla de su residencia Domus Sanctae Marthae.
El pensar solamente en uno mismo y considerarnos el centro de todo “es pecado; es un hábito que tenemos que vencer”, dijo, de acuerdo con Radio Vaticana. Solamente hay que pedir perdón y rogar “para que el Señor nos convierta”, añadió.
“Ser cristiano no se trata de apariencias ni conducta social; no es ponerse un poco de maquillaje en el alma para que sea un poco más bella”, dijo.
Una persona cristiana sirve a su prójimo y las personas deben preguntarse a sí mismas: “¿Hago que otros me sirvan, abuso ventajosamente de otros, de la comunidad, de la parroquia, de mi familia, mis amigos o estoy al servicio de ellos, me pongo a su servicio?”, dijo.
Ser cristianos también significa reconocer que uno es parte de un pueblo entero de viaje con Dios; no solamente un individuo cuya espiritualidad esté confeccionada en lo abstracto o controlada por el medio ambiente, como en laboratorio, dijo.
Dios ha hecho “caminar a su pueblo por siglos para que alcance” la madurez, “la consumación de los tiempos”, dijo.
“¡Cuántos pecadores, cuántas ofensas” durante este camino, esta larga historia de pecado y de gracia, dijo. “Nuestra historia comprende a santos y a pecadores. Es mi historia personal, es la historia de todos, debe comprender nuestro pecado”.
La gracia de Dios siempre está allí, dijo, pues Él “está con nosotros, acompañándonos en nuestro pecado a fin de perdonarnos y acompañándonos con su gracia. No hay identidad cristiana sin historia”.
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